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14/1/16

Casa Comalat, un edificio con dos fachadas.


En nuestros paseos de los jueves, nos acercamos a la Casa Comalat, un edificio modernista singular y posiblemente el menos conocido dentro de la ruta modernista de Barcelona.

Se halla situado en la Avda. Diagonal 442 en su fachada principal y en la calle Córcega 316 en la posterior y fue construido entre 1906 y 1911 por el arquitecto modernista Salvador Valerí i Pupurull, por encargo de la familia Comalat.


En su fachada principal, con grandes balcones de piedra en formaciones curvas que evocan la naturaleza, otros con trabajos de forja y cristaleras, es de un marcado estilo Gaudí, muy similar a la famosa Casa Batlló.


La parte superior está rematada por una abertura calada y con gran ornamentación floral tallada en piedra en todo su alrededor. Está coronado por una torre en forma de gorro de arlequín revestida de cerámica vidriada de color verde que no pude fotografiar desde la calle, es más, las tomas de la fachada principal se hacen difíciles en esta concurrida avenida.


Aquí vemos la puerta principal y la tribuna central entre los pisos principal y primero.


Lo que hace singular a este edificio es que tiene una segunda fachada, la posterior, que da a la calle Córcega, algo que no poseen otros edificios modernistas de la ciudad, ni siquiera los más famosos y que ésta sea, además, completamente distinta a la principal.

Es una decoración colorista, realizada con cerámica policromada que se extiende por toda la fachada, con galerías de madera cerradas por persianas y un elemento ondulante de piedra en "trencadís" en la parte superior que se repite en los balcones y entrada de la parte inferior.


Los detalles de cerámica policromada son obra de Lluís Bru i Salelles, un maestro de este arte ceramista que ha dejado su huella en obras tan importantes del modernismo catalán como la Casa Lleó Morera, el Palau de la Música o el Hospital de la Santa Creu.


El trabajo de la piedra unido al colorido de la cerámica es admirable.


La forja y las vidrieras también tienen un papel importante.


Los detalles decorativos son como para entretenerse y eso es lo que hicimos ¡un montón de fotos de esos detalles!


Como puede verse, es asombroso el trabajo de "trencadís" en la piedra. Este sistema se basa en partir en fragmentos la cerámica y unirlos luego con argamasa, un invento creativo del genial Antonio Gaudí y característico del modernismo catalán. Se cuenta una anécdota en Wikipedia : Gaudí fue al taller de Lluís Brú y al ver como colocaban las piezas, agarró una baldosa y una maceta y rompiéndola exclamó: «A puñados se tienen que poner, si no, no acabaremos nunca».

Ahora os cuento nuestra anécdota : No pudimos hacer fotos al completo de la parte inferior de esta fachada porque había un enorme camión parado justo enfrente ¡Ainnsss!

8 comentarios:

  1. Me encanta, que bonitas las dos fachadas, esto mas que un edificio es una joya. Que suerte tines de vivir en un sitio tan bonito Montse, ¡precioso!
    Besotes
    :D

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    1. Me alegro que te haya gustado, Ana y tienes razón, Barcelona es muy bonita, a ver si te vienes a conocerla ¡sé que te iba a encantar!
      Besitos y feliz finde.

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  2. la verdad es que recuerda un montonazo a la obra de Gaudí. De cualquier manera, es un edificio espectacular.

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    1. Gaudí sin duda es el máximo exponente del modernismo, pero hubo otros muchos artistas que también tenían ese estilo y han dejado obras muy buenas y menos conocidas.
      Un besito.

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  3. No te había comentado y no lo puedo dejar pasar. Es una preciosidad, mejor dicho dos ¡ Tengo que volver a Barcelona !

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    1. Es un edificio increíble y que gana mucho al natural ¡tienes que volver, Teresa! :)
      Besitos.

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  4. Pues aunque no lograras fotografiar la torre o la fachada por culpa de ese camión, has hecho unas tomas tan buenas que son más que suficientes para admirar este increíble edificio.
    Este modernismo tan Gaudí siempre me hace pensar en cuentos fantásticos o en paises de otros mundos. Me encantan.
    Buen finde, Montse! :)

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    1. ¡Graciassss!
      Estos edificios tienen ese encanto, nos hacen transportarnos a otra época y se nos ocurren historias de las personas que los habitaron, a mi también me pasa.
      Un beso y feliz finde, JuanRa.

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