Este enorme graffiti, situado en la Plaça de Sants de Barcelona, es mucho más que un mural pintado, es una reivindicación social y con él quiero abrir una nueva sección en el blog, bajo el título de "Street art Barcelona", para mostrar este tipo de arte urbano.
Can Víes es un centro social okupa, situado en el barrio de Sants de Barcelona. El edificio, que no es en donde se halla el graffiti, es una construcción de 1879 que servía de almacén de materiales para la construcción del metro y que a partir de 1990 quedó en desuso.
Jóvenes del barrio de Sants, al objeto de realizar actividades ocio-culturales y a falta de espacios para ello ocuparon este edificio abandonado en Mayo de 1997.
Parte de este Centro Social Autogestionado es utilizado como vivienda y parte como centro social donde se organizan asambleas, la maquetación del periódico de comunicación popular La Burxa, fiestas, pases de vídeo, talleres de teatro, debates, representaciones teatrales y musicales, presentaciones de libros, pases de películas o documentales sociales e históricos, comidas populares veganas u otras. También sirve de espacio para realizar un taller de teatro semanal, y es la sede de la Colla del baile de bastones de Sants (danza popular y tradicional de Cataluña) impulsado desde el propio Centro Social.
Parte de este Centro Social Autogestionado es utilizado como vivienda y parte como centro social donde se organizan asambleas, la maquetación del periódico de comunicación popular La Burxa, fiestas, pases de vídeo, talleres de teatro, debates, representaciones teatrales y musicales, presentaciones de libros, pases de películas o documentales sociales e históricos, comidas populares veganas u otras. También sirve de espacio para realizar un taller de teatro semanal, y es la sede de la Colla del baile de bastones de Sants (danza popular y tradicional de Cataluña) impulsado desde el propio Centro Social.
Aquí se puede apreciar las dimensiones del graffiti, comparando su tamaño con el de la chica. |
El 26 de mayo de 2014 se comenzó con el desalojo del centro social, lo cual terminó con graves incidentes entre los ocupantes y la policía de Barcelona. Durante el desalojo más de mil personas se congregaron para demostrar su repudio. El 27 de mayo, nuevamente hubo una concentración de un millar de personas que atacaron las retroexcavadoras y levantaron barricadas en contra de las fuerzas del orden. A través de las redes sociales se hizo un llamado a todas las entidades sociales para manifestarse nuevamente en contra del desalojo y demolición del centro social. Durante el tercer día de protesta, hubo más de 30 detenidos además del ataque a las sedes del Convergència Democràtica de Catalunya, bancos y una furgoneta de la televisión pública catalana TV3.
Durante la mañana del 31 de mayo de 2014 y tras el anuncio del Ayuntamiento de Barcelona de paralizar las obras de demolición del edificio tras las protestas, más de 300 personas se concentraron en lo que quedaba del C.S.A. Can Vies para participar activamente en su reconstrucción, con ayuda de obreros, bomberos y arquitectos.
Y después de todo eso, el silencio. Can Víes ha cumplido 18 años y sigue con el proceso de reconstrucción del edificio, sigue también en otra reconstrucción, la social, la que habla de que los barrios deben ser lo que la gente quiera y que la autogestión es posible.
El movimiento "okupa" tiene partidarios y detractores, como cualquier tema que afecte a los intereses económicos o socio-culturales de dos partes bien diferenciadas. No he profundizado en el tema, pero en mi modesta opinión creo que bajo el diálogo entre las partes, ocupas e instituciones, se pueden llegar a establecer acuerdos que hagan posible su legalidad, algo que de hecho se ha conseguido en Madrid, en la casa Eskarela Karakola del barrio de Lavapiés.
El movimiento "okupa" tiene partidarios y detractores, como cualquier tema que afecte a los intereses económicos o socio-culturales de dos partes bien diferenciadas. No he profundizado en el tema, pero en mi modesta opinión creo que bajo el diálogo entre las partes, ocupas e instituciones, se pueden llegar a establecer acuerdos que hagan posible su legalidad, algo que de hecho se ha conseguido en Madrid, en la casa Eskarela Karakola del barrio de Lavapiés.
Estoy contigo, un acuerdo entre ambas partes para legalizar el lugar o para que les ofrezcan otras alternativas. Me gusta mucho la parte social que tiene el lugar, las actividades que hacen que me parecen muy culturales y sanas, un espacio donde hacer todo eso y dar rienda suelta a su arte, el grafiti es impresionante.
ResponderEliminarBesos Montse
:D
Tenemos un desconocimiento total del movimento "okupa" y yo la primera, por eso es importante saber que hay algunos de esos movimientos que son lúdicos y están en beneficio del barrio y sus habitantes, como es el caso de este y que aceptarlo dentro de la legalidad es una buena idea.
EliminarEl graffiti es una pasada! y me alegro que te guste.
Muchos besos.
El mural no puede ser más llamativo. Este es el tipo de graffiti que aplaudo, no esas pintadas y letras estropeando monumentos y mobiliario urbano.
ResponderEliminarMuy de acuerdo en lo que expones. Solemos generalizar y asociar el movimiento okupa con la improductividad y la oposición al sistema establecido, pero estoy convencido que muchos de ellos tienen inquietudes sociales y culturales que no harían más que favorecer a los barrios donde se asientan.
Escuchar, dialogar... esas son la mayores virtudes que deberian tener los políticos.
Visto al natural, impresiona, por el tamaño y por la buena realización de los dibujos, además del significado.
EliminarSolemos quedarnos con las noticias de manera superficial, esas que vemos o leemos, sin conocer los temas a fondo, por eso vale la pena interesarse en saber algo más de lo que nos cuentan.
Ahora, que parece que las cosas toman nuevos rumbos políticos, a ver si se logra más diálogo y más atención a las propuestas de la ciudadanía, por lo menos eso espero.
Un besito.
Menudo grafiti más guapo que has publicado. Bienvenida a la pasión por los grafitis. Será genial ver lo que hay por tu ciudad.
ResponderEliminarLa verdad es que las cosas hay que conocerlas bien de fondo porque en las noticias te manipulan bastante la información y se vende a los okupas como unos bándalos que lo destrozan todo y no respetan nada. Habrá de todo pero en mi opinión quien más tendría que lavar su imagen ahora mismo son instituciones y políticos que de tanto criticar a otros sectores de la socieda no se dan cuenta de que ellos están quedando a la altura del betún.
Un abrazo
Con este grafitti empecé, aunque el grafitti no era el motivo, sino más bien el tema de los okupas que, como tantos otros temas, desconocemos porque nos cuentan una versión desde un lado sin contarnos la del lado opuesto y, como decía mi abuela, para sentenciar un juicio hay que oír a las dos partes.
EliminarLuego seguí con eso de los grafittis porque es impresionante los que encuentro y me he copiado de tí o se me ha pegado esa pasión por ellos, imagino que me entiendes :)
Un besito.