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27/2/14

FOTO-CUENTO : El monje de Güacayán

Montse Fotoblog : Claustro de Sant Pau del Camp (Barcelona)

El monje llegó al claustro hallándolo enmarcado en las débiles sombras crepusculares, cuando faltaba poco para la oración de las vísperas, momento en el que debía concluir su jornada de trabajo, a la que seguiría una cena ligera y la oración de las completas antes de dormir, dando fin a ese día, que podría haber sido un día más de la apacible vida monástica, pero que no fue así.


De buen grado habría atravesado el claustro, porque el cansancio del trabajo matutino en la huerta y la salida a la aldea de la tarde lo habían fatigado más de lo habitual, pero debía rodearlo por las cuatro pandas, tal y como marca la orden.

La panda que está cerca de la Iglesia es en donde está el scriptorium, lugar donde se copian textos manuscritos y a continuación se encuentra el armarium. Para él, que es analfabeto, la contemplación de todos aquellos libros concienzudamente clasificados en los estantes, le causan tal admiración que se ha propuesto aprender a leer y escribir en cuanto le sea posible.


Llega a la panda sur y puede ver, entre los capiteles y en la penumbra del fondo, las escaleras que conducen a las celdas y suspira ante el alivio que sentiría si pudiera ir a dormir en ese mismo momento, después se persigna confiando que ese mal pensamiento le sea perdonado.
En su camino hacia la cocina pasa por el calefactorio, tan silencioso como el resto del Monasterio y por la puerta de la sala del refectorio, lo que le hace pensar en la cena. Vuelve a santiguarse.

Foto mía tomada en Rupit (Barcelona)

Sólo lleva ocho meses en el Monasterio. Antes era carpintero en una pequeña aldea, tenía una casa preciosa construida con sus propias manos, un pequeño huerto donde cultivaba hierbas aromáticas, una esposa sana y cinco hermosos hijos. Un día fue a llevar un encargo a la población vecina y al volver, dos días después, su aldea aún ardía en llamas, después de haber sido arrasada por los soldados del Condado, que no dejaron nada ni a nadie. Desesperado al haber perdido a su familia, sin ingesta ni abrigo, estuvo veinticinco días vagando por las cercanías hasta que fue a dar con la puerta del Monasterio, de forma fortuita.


Desde entonces se cuida del huerto, un trabajo duro que remansa su afligida alma y lleva una vida de oración, apacible dentro de lo que cabe, porque todavía hay noches en las que se despierta de sopetón, atormentado por horribles pesadillas en las que se ve envuelto en llamas.

Cuando hay excedentes de tomates u  hortalizas, los lleva al pueblo junto con ramas de romero y tomillo que recolecta por el camino y los cambia por utensilios de barro, herramientas o velas en casa del maese alfarero.


Hoy la buena esposa del alfarero le había dado una calabaza, la vasija que el Prior le encargó y unas semillas de palo santo que le han alegrado el ánimo. Ha oído hablar de ese árbol traído de la isla La Española, que allá en las Indias lo llaman Güacayán o árbol de la vida, porque cura la sífilis, el mal de muelas y otras enfermedades de los huesos.

Le deja la cesta al cocinero, guardándose las semillas cuidadosamente envueltas en un paño, mientras advierte el olorcillo del puchero que está preparando para la cena y éste le dice que debe bajar a la bodega a llenar la vasija con el licor de frutas que destilan y maceran en el Monasterio.


Continuará...

14 comentarios:

  1. He disfrutado tanto del cuento como de las fotografías. Me gustan mucho las del monasterio, pero no me gustan menos las de la aldea, qué bonita!, Me encantan esos visillos que se ven tras las ventanas, y el balcón con la barandilla de hierro forjado. Ay el otro balcón, el de la barandilla de madera, precioso con todas esas cosas colgando de la pared y la cuerda y todo...me encanta. Supongo que las fotos son tuyas, me encantaría que me dijeras qué pueblo es.

    He disfrutado, Montse. Un beso.

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    1. Las fotos son todas mías, las del Monasterio son mis preferidas, creo que me quedaron muy chulas, jaja y las de la aldea son de Rupit, un pueblo de esos que llaman "con encanto" precioso que te gustaría muchísimo.
      Me alegro mucho que hallas disfrutado, de eso se trata :)
      Muchos besos, guapa y buen finde.

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  2. Solo vuelvo para decirte que lo mío con la Torre de Belém tiene delito...desayuno con ella frente a mis ojos cada día. La tengo pintada en un azulejo pequeñito que me trajo de Lisboa un amigo hace años...Ya ves, así soy de desastre!

    Otro beso.

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    1. Jajaja, menudo delito tienes, Myra!! tenerlo delante de las narices y no darte cuenta.
      Y para desastre el mío, que siempre me olvido de poner de donde son las fotos ¡ay, hija, estamos en el mismo caso!
      Ahora mismo lo pongo, jeje.
      Más besos.

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  3. Que buena pinta tiene tu relato y las fotos con las que lo has acompañado no pueden ser mejores, ¡un lugar precioso Rupit! Con encanto como dices.
    Ya me has enganchado a tus letras Montse, tienes un talento bastante largo con esto de juntar palabras.
    Un beso

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    1. Jajaja, no sabes lo que me alegra tenerte "enganchada"!!
      Gracias guapa, me alegro que te guste.
      Besitos.

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  4. Yo soy fan de tus foto-cuentos, ya lo sabes. Este empieza de lo más sugerente con esa vida retirada del hombre afligido. Y luego esas fotografías tan particulares... me encantan. Ese caserón en Rupit tiene que ser de acogedor... ¡qué buen gusto tienen algunos!

    Venga, quedo esperando continuación, Montse :)

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    1. Ya sé que te gustan mis foto.cuentos y a mí hacerlos, aunque a veces me cuesta ir encontrando las fotos adecuadas para que quede bien.
      Pronto la segunda entrega....
      Mil besos.

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  5. Una manera muy interesante de aprovechar esas fotos para hacer un relato maravilloso. ¡Cuánta creatividad Montse!

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    1. ¿A que si?, eso mismo pensé yo, de qué sirve tener muchas fotos y no sacarles partido.
      Muchos besos, princesa.

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  6. Nenhum caminho é longo demais quando um amigo nos acompanha.
    (Johann Goethe)
    Uma linda e abençoada semana!
    Beijos Marie.

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    1. Una cita preciosa de Goethe que, con tu permiso, me la quedo.
      Un abrazo enorme, Marie y buena semana :)

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  7. Interesante, me voy a ver si hay más partes ;)

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