(Esta foto no es mía)
Hacía mucho tiempo que no disfrutaba de una tarde de sábado paseando por las calles de Barcelona, entre tienda y tienda, escaparate y escaparate y un montón de gente que iba arriba y abajo en un incesante deambular.
Hacía frío y las luces de la iluminación navideña brillaban por encima de mi cabeza y no me dejaban ver el cielo oscurecer. Los escaparates de las tiendas también deslumbraban con sus mejores galas, reclamo intermitente para los paseantes. Los coches atascados con las luces encendidas cegaban al cruzar las calles.
En los puestos de tenderetes que hay en la Gran Vía, en una enloquecedora diversidad de todo tipo de artículos los vendedores procuraban abrigarse con lo que tenían más a mano para atenuar el frío de la tarde y los transeúntes, entre los que me incluía yo, miraban aquí y allá, acercándose a curiosear a la paradita que más les llamaba la atención. ¿Ese juguete es el que sale por la tele? preguntaba una señora. ¿Cuánto vale este foulard?. ¿Y este peluche?
¡Y el olor a churros con chocolate recién hechos, mezclado con el de las patatas fritas!
Hacía las siete y media de la tarde cuando ya llevábamos horas sumergidos en ese barullo nos volvimos a casa.
Yo me sentía como un osito de peluche que hubiera estado jugando con la nieve, cansada y feliz.
Pues a mí me llevas de tienda en tienda, de escaparate en escaparate y con un montón de gente arriba y abajo en un incesante deambular... y me da un patatús, jajaja!
ResponderEliminarBesos!!
Unas botas cómodas y abrigaditas, y a juntar Navidad por las calles! Pero algún día tienes que probar los churros con dulce de leche, ya me contarás!
ResponderEliminarUn beso y un aplauso por tu espíritu navideño (yo me identifico más con Elvira, hace falta gente como tú para mantener viva la Fiesta :-)
Montse, si algún día me pierdo, no me busques en las calles recorriendo tiendas.
ResponderEliminarNo soporto ir de tiendas, la verdad, no soporto casi nada, pero mirar escaparates es que lo odio.
Yo me quedo tomando churros con chocolate y tú recorres todos los tenderetes de la Gran Vía y te metes en El Corte Inglés si te apetece, y disfruta en el barullo de la gente como una abeja en una colmena enloquecida, que yo después del chocolat me haré unos whisquises.
Y si te sobran tiempo y ganas, siempre te quedará
el Ikea.
Besitos dulces con sabor a churros ummmmmmm
qué preciosidad de osito, qué ternura¡¡
ResponderEliminarcon los dos "diítas" que llevamos de lluvia intensísima... yo casi prefiero quedarme con el osito en la cabaña antes que ir de tiendas, jajaja.
si me traen el chocolate con churros... ya sería perfecto¡¡¡
besos
Yo aún no he salido de casa, ni he visto las luces, ni la gente deambular, con el frío me convierto es una especie marioneta que se mueve porque no se quien tira de los hilos...
ResponderEliminarMe alegro que te sintieras como un osito de peluche, me encantan, jajajajaja
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(¸.•´ (¸.•` * *» ?.• Felices Fiestas!¤´¯`.-.º
Elvira a mí últimamente también me agobia el torbellino de las calles y las tiendas, aunque de jovencita me encantaban.
ResponderEliminarPero no sé por qué el otro día me lo pasé fenomenal ¡igual añoraba aquellos tiempos!.
Besitos!
¡Es que soy de las jaranas y las fiestas, Nina!
ResponderEliminarY disfruto mucho más comprando regalitos que haciendo largas colas en los hipermercados ¡eso sí que me pone de los nervios!.
Los churritos no me gustan mucho, me gusta el chocolate que los envuelve,jejeje... Miraré esa receta.
Besos.
¡Ay, que pocas migas íbamos a hacer tú y yo, Fandestéphane!
ResponderEliminarQue conste que no soy una aficionada a ir de tiendas ¿eh?, sólo cuando es necesario ¡y ahora lo es, caray!.
La idea tuya no está nada mal, sentarse en un bar y mirar a los paseantes a través del cristal, calentitos y tomando unos "güisquis", jajaja...
Besitos con chocolate.
¡Mírala que comodona! Pilar, guapa, que el que quiere churros se los tiene que ir a buscar.... venga, ponte el gorro y la bufanda y me acompañas, que un soplo de aire fresco te sentará bien ¿te animas?
ResponderEliminarMuchos besos.
Teresa, te digo lo mismo, arriba el ánimo que bien abrigadita se puede salir a la calle a ver la magia de las fiestas.
ResponderEliminarAsí te sentirás como el osito!!!
Un beso.
(Creo que me voy a copiar ese arbolito que haces que me tiene el corazón robao)
Los pequeños placeres de la vida son los mejores...
ResponderEliminarDí que sí, Drea, que las cosas sencillas son las mejores.
ResponderEliminarMuchos besitos ^_^