En nuestra segunda visita a Dorres, en el pirineo francés, una parte del grupo se quedó en el pueblo y la otra parte se fué a los baños romanos.
¿A dónde creéis que fuí yo?
¡A los baños, Por fin!
Esta vez no hice fotos, las hicieron por mí, solamente disfruté del baño de agua calentita y sulforosa, de la compañía y del paisaje.
Qué envidia me das!!!
ResponderEliminarDrea, eso tiene arreglo, te haces un viajecito hacia el Norte, nos vemos y nos bañamos juntas.
ResponderEliminar¿Recuerdas que tenemos una cena pendiente?
Yo fui uno de los privilegiados que estaban en la piscina. Gracias a todos y especialmente a Rosa y ignacio por ese maravilloso fin de semana en la Cerdanya. Con amigos como vosotros, no se si llegará Paris.
ResponderEliminarQué hermoso, seguro que en verano no tiene el mismo gusto. Creo que has elegido bien, pueblos hay en otras partes pero esos baños son irrepetibles.
ResponderEliminarJosep Lluís ¿aún piensas en París después de esos baños?
ResponderEliminarUn beso, privilegiado bañista.
Nina, ya me lo perdí una vez, así que no iba a dejar escapar la oportunidad... y como tú dices pueblos hay muchos.
ResponderEliminarUn beso.